En situaciones clínicas, los animales no pueden prescindir del calor externo porque la anestesia altera la termorregulación natural del animal. Por eso, entre otras cosas, se recomienda el uso de mantas térmicas.
Las mantas térmicas MOECK se colocan debajo del paciente y, gracias a sus tres capas textiles diferentes, garantizan un suministro de calor óptimo.
- El aire caliente suministrado se distribuye uniformemente debajo del paciente
- El animal se templa activamente y se almacena de manera que alivia la presión
- Campo de operación libre
- Lavable a 60 °C y reutilizable
- Compatible con casi todos los dispositivos de aire caliente disponibles en el mercado
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